La Obesidad Infantil

La Obesidad Infantil es una de las principales causas de diabetes, hipertensión y niveles altos de colesterol en sangre de los niños y niñas a nivel mundial. La Organización Mundial de la Salud está seriamente preocupada.

Debido a los altos índices de sobrepeso registrados, en 1998 la declaró como una pandemia. Hoy sigue causando graves estragos en la salud de los niños y está contribuyendo a la proliferación de enfermedades peligrosas entre ellos y la población adulta.

¿Qué es?

¿Qué es la Obesidad Infantil? Es una enfermedad que conlleva la acumulación excesiva de grasa corporal en los niños, con respecto a lo que se espera para su edad, talla y sexo, y que repercute gravemente en su salud.

Algunos de los motivos que pueden señalarse son:

Malos hábitos alimenticios: supresión de la lactancia materna antes de los 6 meses, aunado a grandes ingestas de calorías.
Poca o nula actividad física (actividades sedentarias como los videojuegos, la televisión, el móvil)
Factores hormonales y genéticos (Herencia)
Deficientes patrones de manejo de las emociones (estrés, aburrimiento, bullying, maltrato o violencia doméstica, etc.)
Elementos socio-ambientales (economía pobre)

¿Por qué es tan grave el sobrepeso o la obesidad en los infantes? Además de las terribles consecuencias sobre su salud y autoestima, las probabilidades de ser adultos con complicaciones médicas serias se elevan.

Algunas de las repercusiones más notables son:

Baja autoestima y depresión debido al bullying y rechazo social.
Ansiedad y dificultades de aprendizaje.
Mal comportamiento.
Desarrollo de Diabetes tipo 2.
Enfermedades del síndrome metabólico.
Alta presión arterial y niveles elevados de colesterol en sangre: arterioesclerosis e infarto al miocardio.
Trastornos del sueño.
Enfermedad del hígado graso.
Aumento de probabilidad de fracturas.

Tipos de Obesidad Infantil

Algunos niños (as) poseen características físicas más grandes que sus amistades, además pueden almacenar diversas cantidades de masa corporal en distintos momentos de su vida. Sin embargo, es posible identificar la obesidad en ellos.

Para poder determinar si un niño o niña tienen sobrepeso u obesidad hay que tomar en cuenta diversos factores, como:

Índice de masa Corporal (IMC), el cual se obtiene al dividir el peso entre la estatura.
Tablas comparativas de crecimiento de acuerdo con la edad y el sexo.
Los antecedentes familiares de salud, crecimiento y peso.
Hábitos alimenticios y de actividad física del niño (a).
Historial de salud y psicosocial.
Algunos otros exámenes médicos.

De acuerdo con lo que estipula la OMS existen 4 tipos de Obesidad Infantil según el valor del IMC:

Obesidad tipo 1: Considerada como de bajo riesgo, es aquella que puntúa el IMC de 30 a 34.9.
Obesidad tipo 2: Posee un riesgo moderado de desarrollar otras enfermedades más graves. Esta obesidad ubica el IMC de 35 a 39.9.
Obesidad tipo 3: Obesidad mórbida cuyo valor de IMC es igual o mayor a 40.
Obesidad tipo 4: El valor indicado de IMC es igual o mayor a 50 y se considera obesidad extrema.

De acuerdo con la distribución de la grasa, existe otra clasificación, cuyos datos se obtienen al dividir el perímetro de la cintura entre el contorno de la cadera. Para las niñas el límite es 0,9 y para los niños es 1.

Obesidad Androide

Son los niños cuyo exceso de grasa se percibe claramente en sus caras, la zona del tórax y la región abdominal. Comúnmente se le asocia la forma de su cuerpo con una manzana.

Obesidad Periférica

Básicamente, se refiere a la acumulación de grasa corporal en el área de la cadera y los muslos, por lo que se asocia su cuerpo con una pera. Es común encontrar problemas de várices y artrosis a nivel de rodilla.

Obesidad de Distribución Homogénea

La distribución de la grasa corporal no domina ninguna parte del cuerpo más que en el resto.

Alimentación Saludable para combatir la Obesidad Infantil

Seguir un régimen de Alimentación Infantil Saludable está al alcance de todos. Solo se requiere un cambio de actitud mental de toda la familia y mejorar los hábitos físicos, la adquisición de los alimentos y la preparación de los menús.

A continuación, encuentra algunas sugerencias prácticas para alcanzar esta meta:

Vayan juntos a adquirir los alimentos, en la medida de lo posible.
Reduce la compra de alimentos procesados o pre-cocidos debido al alto contenido de calorías, grasas y azúcares.
Conversen sobre la importancia de los alimentos saludables.
Preparen juntos los alimentos.
Coman en familia, juntos en la mesa, compartiendo un momento social agradable.
Limita y/o elimina las bebidas azucaradas y comidas rápidas.
Incluye en el menú, el doble de porciones de frutas y verduras por porción servida, ajustando siempre la cantidad que tu hijo requiere de acuerdo con su edad.

Una excelente referencia para saber lo que cada persona necesita comer por porción es el tamaño de su propio puño.

Por supuesto, un buen programa de alimentación saludable va de la mano con suficientes horas de descanso por las noches y de actividades físicas adecuadas: caminar, jugar al aire libre, en un parque o practicar algún deporte