Muchos progenitores reconocen que les cuesta motivar a sus hijos a estudiar. Pasan muchas horas detrás de ellos para que realicen sus deberes escolares, lo que los desgasta física y mentalmente.
Quizás observen que otros niños se entusiasman por aprender, mientras que para su hijo parece una tortura.
¿Se tratará de alguna deficiencia cognitiva o solo le está manipulando? ¿Por qué no se motiva a aprender como los otros chicos si es tan inteligente? Es muy probable que el foco del problema no esté dentro del niño sino fuera de él.
Fases Madurativas del cerebro y los Planes de Estudio.
Es inconcebible que a los 5 años de edad se les exija a los niños el saber leer y dominar la escritura como requisito para iniciar el primer grado de la primaria. Muchos padres angustiados buscan la ayuda psicopedagógica creyendo que sus hijos tienen problemas de aprendizaje.
Lo cierto es que los planes educativos no pueden generalizar la enseñanza de ciertos conocimientos académicos para todos los niños por igual ni forzarlos a ir al mismo ritmo de aprendizaje pues, cada estudiante es diferente y posee estilos y ritmos distintos.
Si bien es cierto que se puede estimular la lectura y escritura desde que están en el vientre, hay que respetar su madurez neurológica y la edad legal para iniciar la primaria: 6 años.
Es a partir de este momento cuando se inicia la enseñanza formal de la lectoescritura.
Los defectos del Sistema Escolar.
Es alarmante que de cuatro niños que están estudiando la primaria, uno no la terminará. Es decir, que la ¼ parte de la población estudiantil abandona las aulas de clases antes de culminar su instrucción básica.
¿Por qué aumenta la deserción escolar?
- THDA.
- Dislexia.
- Altas Capacidades.
- Desatención del Sistema Educativo a los estudiantes.
4 claves para solucionar los problemas.
¿Cómo se pueden atender estas problemáticas?
- Mejorando la formación de los maestros .
- Optimizando los departamentos de Orientación Educativa.
- Capacitando a los padres para que mejoren la atención a sus hijos.
- Brindando una mejor atención educativa y sanitaria para los niños con TDAH, Dislexia o Altas Capacidades.
Adaptaciones Curriculares: el Triunfo de las Necesidades Educativas Especiales.
Toda persona es capaz de aprender a su propio ritmo y estilo. Solo hay que descubrir cuál es esa forma en la que el niño accede al conocimiento. A un niño con THDA se le dificulta sobremanera centrar su atención y concentrarse por mucho tiempo. Se cansa con las tareas, necesita moverse.
Un niño con dislexia puede cambiar, omitir o agregar letras, palabras y números. Por ello es lento y comete errores tanto al escribir como al leer. Le cuesta comprender lo que lee.
Por otro lado, quien es superdotado presenta problemas de adaptación social, conducta y de aprendizaje.
Profesores, maestros y todo el sistema educativo deben aprender a hacer adaptaciones curriculares. Así disminuirá la deserción escolar.
¿Qué pasos concretos hay que dar?
- Elaborar la caracterización individual de los estudiantes para conocer su situación concreta.
- Mantener una comunicación directa y permanente con los padres sobre avances y dificultades.
- Adaptar la evaluación de conocimientos y habilidades a su ritmo y estilo de aprendizaje.
Despistaje en 3 pasos: ¿Es flojo o tiene algún problema neurológico?.
Con la “Guía para padres gratuita” es posible identificar cualquiera de estas condiciones y abordarlas de forma exitosa en solo 3 pasos, con la puesta en práctica de diversas herramientas. Algunas sugerencias claves para motivar a su hijo son:
- Involucrase en los estudios como familia.
- Normas y Pautas claras.
- Motivación.
1. Involucrase en los estudios como familia.
Es primordial que la familia brinde el apoyo que los chicos necesitan sin anularlos al hacer las tareas para motivar. Facilitarles un entorno escolar adecuado, mediando entre las consignas escolares y su capacidad comprensiva.
2. Normas y Pautas claras.
Ser consistentes en el establecimiento y cumplimiento de normas claras. Establecer sistemas de recordatorio de objetivos concretos y refuerzo de conductas deseables.
3. Motivación.
Fomentar el lenguaje positivo al comunicarse, promoviendo la autonomía e iniciativa es algo fundamental para motivar. Graduar las expectativas académicas al fruto diario.
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