Cómo Elegir los Mejores Cuentos Infantiles
Existe una relación directa entre el desarrollo cognitivo de los pequeños y los cuentos infantiles. Se dice que mientras más le leas a tu bebé, mejor responderá a cualquier eventualidad que se le presente en la vida adulta.
Pero habiendo tantos cuentos a disposición, ¿cómo elegir los mejores cuentos infantiles? Sin duda, que existen muchos elementos a considerar como la edad, gustos, madurez entre otros, desarrollando así su imaginación y el gusto por la lectura.
Factores a tener en cuenta para elegir los mejores cuentos infantiles
Cada infante es diferente, puede que los cuentos infantiles en audio fascinen a unos, pero sea aburrido para otros. Sin embargo, hay una amplia variedad de factores que determinarán qué cuentos le va mejor a cada niño.
Estos factores son: la edad, la madurez intelectual y la madurez emocional. Por lo tanto, si tomas en cuenta dichos factores tendrás éxito en múltiples aspectos.
Edad
Los cuentos infantiles, son una buena forma de inculcar principios, enseñanzas y reforzar la buena conducta, aun así, la edad no debe dejarse a un lado.
Esto es porque los cuentos están adecuados a la madurez de cada niño y, por ende, a las necesidades de este.
Las edades se pueden dividir de la siguiente forma:
- De cero a un año.
- De dos a tres años.
- De cuatro a seis años.
- De seis a ocho años.
La clasificación anterior, se encuentra agrupada en más de una etapa, en función de la madurez del infante, para que el campo de acción al elegir los cuentos infantiles sea más amplio.
De cero a un año
En edades muy tempranas es ideal que los cuentos infantiles para leer vayan acompañados de texturas, colores y sonidos para estimular el aprendizaje y la curiosidad del pequeño. De esta manera irá desarrollando amor por los libros y la lectura.
Sus primeras expresiones vocales estarán vinculadas a las imágenes que asocie con la historia asimilada. Por eso, en los cuentos cortos para niños predominan las imágenes por encima de las palabras.
Cuando son guiados por sus padres en la asociación de la imagen con el vocabulario les ayudará a reforzar y aumentar su lenguaje, aunque a simple vista el progenitor crea que no comprende el significado de los sonidos que pronuncie más adelante irán viendo los resultados positivos.
De dos a tres años
En esta etapa, los cuentos cortos infantiles son la mejor opción. Esto se debe a su poca capacidad de concentración, por lo que se distraen fácilmente si ven que la lectura se extiende. Por lo tanto, cuentos cortos llenos de emoción, aventura, e ilustraciones llamativas son la mejor opción.
En caso de que se limite solo a observar los dibujos, se puede continuar con la lectura mientras el niño observa los dibujos, de esa manera volará su imaginación. Pero si no se logra su atención, se debe dejar la lectura para otro momento, eso sería lo más conveniente.
De cuatro a seis años
El aumento progresivo de la capacidad lectoescritora se ve reforzada con la inclusión de los cuentos infantiles para leer. Estos actúan como estimulantes de la inteligencia emocional donde la creatividad también aumenta.
De seis a ocho años
Como los chicos de estas edades ya están en la primaria, y han fundamentado la lectoescritura, se recomienda buscar los cuentos infantiles que inciten a la comprensión lectora. Así que, las mejores opciones son cuentos que finalicen con moralejas, encierren lecciones, o preguntas de compresión lectora.
Nivel de madurez
Muchas veces la madurez emocional no es compatible con la edad del niño, un especialista podrá determinar en qué nivel se encuentra el pequeño. Como un soporte en la psicología existe una rama conocida como la psicoliteratura.
Los especialistas en psicoliteratura se encargan de estudiar a fondo los gustos e intereses del niño, así como de su nivel de crecimiento emocional e intelectual. Dicha información les permite tener una clara idea del tipo de lectura que requiere para su desarrollo en todo sentido.
Tipos de cuentos infantiles
A pesar de vivir en una era tecnológica, los cuentos infantiles no han pasado de moda. Y más cuando se trata de estrechar los vínculos afectivos entre padres e hijos. Los tipos más comunes son:
- Cuentos reducidos: Aquí pueden ir incluidos las historias cómicas, y personajes con carácter afable. Se busca estimular el humor infantil.
- Cuentos largos: Son historias con personajes libres de ficción y, aunque suelen ser ideados por su autor, se caracterizan por ser explícitos en los detalles.
- Cuento final feliz: Los cuentos de hadas son los más famosos en este estilo. Protagonistas fantásticos encarnan una lucha contra el mal, pero siempre terminan ganando los buenos.
- Cuento moraleja: En este renglón bien pudieran entrar las historias populares o tradicionales.